
A lo largo y ancho del territorio español habitan algunas poblaciones cuyo nombre da lugar a malas o graciosas interpretaciones.
Estas cohabitan con otras cuyas nomenclaturas no dan juego. Sin embargo, los españoles son muy dados a poner motes extraños, de manera que los gentilicios afectan tanto a los territorios de extraño nombre como a los de nomenclatura normal.
Los gentilicios son importantes ya que indican el lugar de origen de una persona u objeto, generalmente se forman por la unión del nombre del lugar con algunos sufijos.
Estos son algunos de los gentilicios más curiosos
CHICHILINDRIS
Arroyo de la Miel, Málaga
TRABUQUEÑOS
Morón de la Frontera, Sevilla
GUASINOS
Guasa, Huesca
GUARRAMANENSES
Guarromán, Jaén
TRASQUILADOS
Yunquera de Henares, Guadalajara
CONEJEROS
Villaconejos, Madrid
SEXITANOS
Almuñecar, Granada
COGOLLUDENSES
Cogolludo, Guadalajara
CALLOSINOS
Callosa de Segura, Alicante
RABOSSES
Lucena del Cid, Castellón
VIRGITANOS
Berja, Almería
AGUANOSOS
Frigiliana, Málaga
CEBOLLANO
Cebolla, Toledo
CARIÑÉS
Cariño, A Coruña
COCHINERO
Ingenio, Gran Canaria