
Con motivo de la inauguración del WOCMES (las siglas de World Congress for Middle Eastern Studies), que celebra esta semana en Sevilla su V edición, Felipe VI ha apelado a reforzar la cooperación entre las dos orillas del Mediterráneo para poder afrontar los múltiples retos sociales y de seguridad en esta zona estratégica para España y Europa.
“El Mediterráneo debe ser un espacio compartido para la paz, la prosperidad y la estabilidad que nuestros ciudadanos anhelan”,
Felipe VI “Esta meta requiere una responsabilidad conjunta mucho más allá de los países del Mediterráneo. Porque la estabilidad y la prosperidad de las sociedades europeas está estrechamente vinculada con el destino de Oriente Próximo y el norte de África” señaló.
Las palabras de Felipe VI llegan días después de que la UE haya alcanzado in extremis un acuerdo de mínimos para gestionar la migración y después de un fin de semana en el que la presión migratoria sobre las costas españolas se ha agudizado.
El mediterráneo se ha convertido en un escenario de dolor. Sin contar estas últimas cifras, desde principios de 2018 ya son 16.295 los migrantes que han llegado en España. La cifra fue mayor que la de todos los que arribaron a las costas de Italia (3.147 personas), Grecia (2.386) y Malta (224), según los datos de la Organización Internacional para las Migraciones.
Felipe VI ha llamado la atención también sobre los anhelos y la dignidad de las personas que cruzan el Mediterráneo en busca de un futuro mejor en Europa. “Los países del norte de África y de Oriente Medio son la tierra natal de gente joven, dinámica y creativa que quieren cumplir sus sueños, que están orgullosos de su identidad, que reclaman la dignidad humana que les corresponde y que también se sienten, de manera natural y legítima, ciudadanos del mundo”, ha señalado.
Fuente: www.politica.elpais.com