
La Vinotinto femenina sub 20 realiza su última parada en la ciudad de Mérida, como parte de su preparación para el Suramericano de la categoría que se disputará en Ecuador, en enero de 2018. Desde el martes 26 de diciembre, el cuadro criollo se encuentra trabajando en el páramo de La Culata, en condiciones similares a las que afrontará la nación meridional.
El asistente técnico Gerardo Contreras, de amplia experiencia en la preparación en la altura, explicó las especificaciones del módulo y las ventajas de mantenerse a 2.700 metros sobre el nivel del mar hasta la fecha de partida a la competencia.
“Se viene a la altura a buscar la hipoxia, el síndrome que denominamos ‘mal de páramo’ porque eso es lo que se va a reflejar en la altura”, expuso Contreras en declaraciones al departamendo de prensa de la Vinotitno femenina. “Vamos a una ciudad de Ecuador (Ibarra) que está a 2.200 metros sobre el nivel del mar y nosotros estamos en el Páramo La Culata y, por lo tanto, vamos a ganar 500 metros por encima de donde vamos a competir. Eso nos va a favorecer en la cantidad de oxígeno en la sangre”, agregó.